Pasión y Poder, que le bajen 2 rayitas

Dos hombres un camino
Pasión y Poder es el refrito estrenado en el Canal de las Estrellas el pasado 5 de octubre en horario estelar, haciendo competencia con ¿Qué Culpa Tiene Fatmagül? en la otra televisora.
Desde ya me aburrió. ¿Por qué el mismo nombre de la original de 1988? Ya es de todos conocido que no tienen nuevos guiones pero pues disimúlenlo tantito cambiándole el nombre de perdido, como lo hicieron con A Que No Me Dejas cuya original se llamaba Amor en Silencio.
La historia original de Marissa Garrido cuenta en esta ocasión con dos super actores, ahora ya maduritos, de protagonistas. Estos hombres se enfrentan en un duelo mano a mano por ver quién tiene más poder entre otras cosas.
El primer galán madurín es Fernando Colunga (Eladio Gómez Luna), con una expresión en sus ojitos algo cambiada desde su última aparición en Porque el Amor Manda (2012); el otro galán madurín es Jorge Salinas (Arturo Montenegro) quien nunca ha sido santo de mi devoción. No niego que sea un buen actor pero no es festín para mis pupilas como lo era antes Fernando Colunga por el cual yo literalmente babeaba cuando andaba de romance con Matilde Peñalver y Beristain (Adela Noriega) en Amor Real (2003). Estos dos machos se disputarán el poder… ¿y la pasión? Ya veremos.
La historia se parece a la de los Montesco y los Capuleto pero con sus variantes por supuesto. Dos hombres ricos, sumamente poderosos, uno ya nacido rico, Montenegro; el otro se hizo a base de esfuerzo, Gómez Luna. Ellos se odian a muerte por una mujer, Julia (Susana González) esposa de Eladio. Ambos tienen hijos que en algún punto se van a enamorar y tantán ya se acabó la novela.
La familia Gómez Luna la conforman: Eladio, Julia su esposa sumisa que solo ve por su hijo David (José Pablo Minor), el joven alivianado buena onda que todo mundo quiere, excepto su propio padre quien duda que sea su hijo biológico.
La otra familia es la de los Montenegro: Arturo, el padre; Nina (Marlene Favela), su esposa interesada y trepadora quien consigue todo lo quiere a base de sus encantos; Miguel (Jauma Mateu), hijo de un primer matrimonio de Arturo; Erick (Alejandro Nones) casado con Consuelo (Altair Jarabo); Regina (Michelle Renaud) quien está comprometida con Joshua (Oscar Medellín); y Daniela (Irina Baeva).
Los Montenegro son una familia bastante disfuncional. Al hijastro/medio hermano lo humillan y maltratan todos excepto la súper buena de Regina. El hijo mayor de Nina, Erick, se ve mucho más grande que el hijastro Miguel y además le pone el cuerno a su esposa Consuelo. Todavía no me acostumbro a ver a Altair de sufrida. Regina quien estudia y quiere trabajar en cambio Daniela es la loca de la familia, de cascos ligeros, sin oficio ni beneficio ¡Qué bonita familia, qué bonita familia!
Regina Montenegro y David Gómez Luna se conocen casualmente y… ya basta de hablar de la trama.
Televisa no ha cambiado su formato de hacer novelas. No apuestan por algo nuevo, no se arriesgan y van a lo seguro, según ellos. Continúan los sets acartonados, siguen los hospitales y las oficinas igual de acartonados, los mismos exteriores, la misma fachada de casa que ha salido en varias novelas, lo mismo, lo mismo y lo mismo, vaya ni siquiera la música de entrada me enganchó. Aunque si bien el tema de entrada es muy bonito tiene algunos acordes que me hacen recordar a la música de la película Terminator 2: El Juicio Final ¿será un mensaje subliminal? Chéquenlo.
Espero que el Güero Castro y su equipo de dirección se pongan las pilas al dirigir a estos dos superactores que nunca habían actuado juntos.
Jorge Salinas está bien pero Colunga no. Que le baje 2 rayitas a su protagonismo porque le sale fatal. Su sobreactuación como megavillano raya en lo ridículo.
Por lo demás, mi calificación de este telerefrito totalmente predecible que no me gustó: 5.5 y se fueron de gane.
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