Hijas de la Luna. Crítica final de la telenovela

Muertas que reviven
Una vez más un clásico de la televisión latinoamericana fue destrozado en manos del productor Nicandro Díaz con uno de los finales más ilógicos de todos los tiempos.
Hijas de la Luna fue la segunda versión mexicana de la telenovela colombiana Las Juanas de Bernardo Romero. La realización dejó mucho que desear y mejor que ni nos hablen de una segunda temporada.
(Spoilers) En el capítulo final vimos cómo medio elenco está en duelo por la muerte de Juana Victoria (Michelle Renaud) a quien entierran tras su repentina muerte. Sin embargo más tarde Juana Victoria sorpresivamente despierta dentro de su ataúd y es rescatada por Darío (Alexis Ayala) quien había planeado su supuesta muerte ¡para rescatarla y volverla a matar! Darío se la lleva en un barco y la encierra en un cuarto frío poniéndole una cámara para que sus seres queridos la vean morirse de frío. Como Juana Soledad (Jade Fraser) está “conectada” con Juana Victoria, ella también empieza a morirse de frío. Sebastián (Danilo Carrera) logra rescatar a su amada Juana Victoria y Darío cae en su propia trampa muriendo congelado. Tiempo más tarde Juan (Omar Fierro) y Leonora (Cynthia Klitbo) renuevan sus votos de casados, Juana Soledad anuncia que está embarazada y Juana Bárbara (Lore Graniewicz) anuncia que irá a competir a un Campeonato Mundial. Mauricio (Mario Morán) y su hermana Estefanía (Mariluz Bermúdez) refrendan su unión. Al final las Hijas de la Luna pactan seguir siempre juntas y todos celebran la boda de Juana Victoria y Sebastián con la música de La Original Banda El Limón.
Un final absurdo coronó el mal sabor de boca que dejó esta telenovela que desde el principio se veía barata y añeja.
Como casi toda telenovela reciente de Televisa una vez más el villano secuestró a la protagonista y después el asunto terminó en boda.
Para estirar la historia a las dos horas que tenían que llenar de horario nocturno de domingo, los guionistas nos recetaron la más estúpida venganza que un villano podría haber concebido.
Primero Darío intoxica a Juana Victoria para que pareciera muerta (en lugar de haberla matado desde un principio) y una vez que ya está velada y enterrada ¡la revive para volverla a matar frente a su familia! Eso sí, cuando sacaron el ataúd de la tierra, este estaba limpiecito sin rastro alguno de mugre.
El villano se lleva a la revivida Juana Victoria a un barco para encerrarla en un cuarto frío y transmitir su muerte. Al mismo tiempo en un hospital Juana Soledad sufre una extraña hipotermia por su conexión fraternal con Juana Victoria. En el hospital, Juana Soledad es declarada muerta por un medicucho y todos lloran, pero cuando Sebastián logra sacar a Juana Victoria del congelador y Juana Soledad revive ¡el negligente médico solo sonríe! ¡Nadie le reclamó su falso diagnóstico!
Tras el rescate de la protagonista Darío queda encerrado en el congelador y ¡nadie lo salvó! O sea todos son unos asesinos porque dejaron que el villano muriera en lugar de rescatarlo y mandarlo a la cárcel. En el barco estaban Sebastián y Juana Victoria, y el resto de la familia vio lo que sucedió en una pantalla pero nadie hizo nada. Además nunca se supo por qué Darío odiaba tanto a Mauricio.
Si bien Hijas de la Luna en general no estuvo tan patética como El Bienamado, este final sí merece estar entre los peores del año.
La pareja protagónica formada por Michelle Renaud y Danilo Carrera lo fue solo de nombre pues por responder a una mala dirección de escena, el resto del elenco les robó el show. Mil veces mejor estuvo la pareja de Geraldine Galván y Mario Morán, y las de Jade Fraser y Jonathan Becerra y Lore Granewicz y Gonzalo Peña no se quedaron atrás.
El director Salvador Sánchez nunca pudo encarrilar a la recién separada Renaud ni al poco confiable Carrera. Calificamos de poco confiable a Carrera pues nunca se sabe qué resultados dará. Así como destacó en La Doble Vida de Estela Carrillo aquí pasó con más pena que gloria.
Bien por Omar Fierro, Eugenia Cauduro, Arcelia Ramírez, Marco Uriel, Mariluz Bermúdez y Cynthia Klitbo. A esta última ya la extrañamos en un papel de villana mayúscula como las que la hicieron famosa hace ya décadas. A Alexis Ayala lo vimos muy desmejorado pero sacando adelante el “papel” que le fue asignado.
Bien por la parte que fue filmada en locaciones de Mazatlán pero las escenas grabadas en foro revelaron lo atrasados que siguen los directores de cámaras e iluminación en Televisa.
Qué triste que mientras tengan algo de rating estos equipos de producción y escritores seguirán produciendo cosas como esta. Qué poca dignidad.
Disfruta todos nuestros artículos sobre Hijas de la Luna dando click en la siguiente imagen:
Pues a mi me encanto la novela claro las originales siempre serán bellas historias, obvio son originales, pero me quedo con las hijas de la luna y en especial con MANUES hermosos la pareja.