Josué y la Tierra Prometida. Crítica final de la telenovela

Promesa cumplida
En lunes llegó a su final por Imagen TV la telenovela brasileña Josué y la Tierra Prometida la cual estaba al aire desde noviembre del año pasado.
Josué y la Tierra Prometida fue la continuación de Moisés y los Diez Mandamientos y compartieron algunos personajes entre ellos el del protagonista Josué (Sidney Sampaio), el sucesor de Moisés.
(Spoilers) En el capítulo final vimos cómo Zaqueo (Ricky Tavares) encuentra a Samara (Paloma Bernardi) dormida en una cueva del desierto. La bella villana muere en sus brazos tras rogarle que les pidiera a todos a quienes hizo daño que la perdonaran. Aruna (Thaís Melchior) perdona a su tía Leia (Beth Goulart) quien ahora se dedica a atender enfermos. Josué reparte las tierras de Canaán entre las tribus de Israel tal y como se lo ordenó Dios. Rune (Douglas Sampaio) y Livana (Letícia Medina) refrendan su amor así como Raab (Miriam Freeland) y Salmón (Rafael Sardão). Otniel (Leonardo Miggiorin) es rescatado de quienes lo tenían esclavizado y después lucha contra unos gigantes para ganarse la mano de Acsa (Marisol Ribeiro). Pasan 30 años y el anciano Josué muere tras quedarse dormido en el regazo de Aruna. Pasan más años y el pueblo hebreo clama por Otniel como su nuevo juez. La historia termina con los espíritus de Josué y Aruna admirando la tierra prometida de Canaán que Dios les otorgó.
Esta telenovela bíblica cuenta una versión libre de la historia del pueblo hebreo desde la muerte de Moisés hasta la repartición de las tierras de Canaán entre las doce tribus de Israel descendientes del profeta Jacob padre de José de Egipto.
En esta ocasión vimos la lucha de los hebreos comandados por Josué en contra de los reinos de Jericó, Hai y Jerusalén.
La historia contó con numerosos personajes y en ella sobresalió tanto el exotismo pagano de los reinos enemigos de Josué como la unidad de las familias de las tribus hebreas.
Josué y la Tierra Prometida tuvo muchos buenos personajes como los villanos hebreos Samara, Mara (Cristiana Oliveira), Acán (Kadu Moliterno) y Tobías (Raphael Viana); los reyes perversos Marek (Igor Rickli), Kalési (Juliana Silveira) y Adonisedec (Mario Frías); y los nobles hebreos como el cochinón Haniel (Paulo César Grande) y el galán Salmón.
Aplaudimos la labor titánica de la producción para administrar desde los vestuarios y maquillajes hasta las escenografías. También va nuestro reconocimiento para los actores y actrices pues se requiere mucha pasión por el oficio para someterse diariamente a los procesos de caracterización por más de un año.
Josué y la Tierra Prometida deja constancia de cómo realizar un buen trabajo en equipo además de presentarnos a un héroe bíblico del que poco se habla.
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Muy ficticia, crei que era toda basada en la palabra de Dios. Te lleva a la confusion.