El pastor que sería rey

Con seis años de retraso llega a México a través de Imagen TV la miniserie brasileña Rey David. La versión original de esta historia contó con 30 capítulos.

La acción se sitúa cientos de años después de la historia de Josué y la Tierra Prometida.

En el primer capítulo vimos que David (Leandro Léo) es un joven pastor ninguneado por su padre y por sus hermanos. Como es más bien de complexión pequeña se burlan de él cuando dice que quiere ser soldado e ir a la guerra. David armado tan solo con su resortera es capaz de enfrentarse a un oso y hasta un león. El Rey de Israel en ese entonces era Saúl (Gracindo Júnior) y el profeta que guiaba a la comunidad era Samuel (Isaac Bardavid). El rey Saúl tiene problemas con uno de sus generales pues éste le reclama que no ha sido un buen líder. El profeta Samuel también está muy disgustado con el rey pues éste ha desobedecido las órdenes de Dios. En el campo David conoce a Betsabé (Nadinne Oliveira), la hija del general, y la salva de ser raptada. Dios ordena a Samuel buscar otro rey y tras visitar a la familia de David, le indica a éste que él es el elegido para guiar al pueblo de Israel.

A diferencia de su transmisión original, Imagen TV sí ha respetado el orden cronológico de los relatos del Antiguo Testamento.

La historia del rey David comienza de una manera similar a la de José de Egipto. El protagonista es un joven solitario bulleado por sus mayores sin embargo resulta ser el elegido por Dios.

En el capítulo de arranque vimos su lado valiente, su lado artístico y hasta su lado romántico al quedar prendado de la bella Betsabé.

El camino de David no será fácil y los obstáculos los pondrán sus propios hermanos, el rey Saúl y la perversa reina Ainhoa (Marly Bueno).

La producción se ve bien cuidada pero se notan los años en la calidad de la imagen.

Ya veremos qué tal canta este Rey David.