Camaleones ¿historia juvenil o thriller policíaco?

Telenovela de «vanguardia»
El 2009 vio llegar a la pantalla una historia producida por Rosy Ocampo, quien bajo el concepto de telenovela de vanguardia (el cual se manejó desde Las Tontas No Van al Cielo), presentó una idea que hasta entonces no se había visto en televisión: Camaleones.
Si bien, el concepto, salía de los estándares que hasta ese entonces se veían en los melodramas, hubo ciertos factores que propiciaron que esta telenovela no alcanzara el éxito esperado. Aunque se le apostó al producto, Camaleones fue una de esas novelas que en general no logró despuntar.
El reparto
Uno de los puntos fuertes (si no es que el más fuerte), fue el elenco que la productora logró reunir. En primer lugar sus protagonistas: Alfonso Herrera, quien tras el éxito avasallador de Rebelde, volvía a la pantalla de Televisa y junto a él, Belinda, quien hacía su reaparición en una telenovela tras ocho años de ausencia y una recordada polémica salida de Cómplices al Rescate.
Junto a ellos se integró un reparto interesante con figuras como Edith González, Guillermo García Cantú, José Elías Moreno, Ana Bertha Espín y Manuel “El Flaco” Ibáñez. Todos ellos llevando el peso de la historia como actores experimentados, pero contando también con un grupo de actores juveniles tales como Sherlyn, Grettell Valdez y José Luis Reséndez.
Camaleones nos dio la oportunidad de conocer a actores principiantes que poco a poco irían destacando hasta lograr ser hoy día estelares en diversas historias. Entre los nombres que podemos destacar encontramos a Mariluz Bermúdez, Michelle Renaud y Ferdinando Valencia. Así como a Paul Stanley (que a la postre sería conocido como un destacado conductor) y la presentación en televisión del cantante Pee Wee.
La trama
El Colegio San Bartolomé está por iniciar un nuevo curso y la directora Francisca (Edith González) contrata a un par de supuestos hermanos Valentina (Belinda) y Sebastián (Alfonso Herrera), ignorando que son parte de un plan de “El Amo” , quien los manda robar piezas de arte y así estar en el ojo de Augusto (Guillermo García Cantú), jefe de la policía de cuestionable integridad.
Al verse obligados a vivir como hermanos, los protagonistas irán entrelazando su vida como profesor y prefecta respectivamente con su papel de camaleones a las órdenes de su amo y sin darse cuenta se van enamorando poco a poco.
A la par de la historia principal nos vamos encontrando subtramas como el constante conflicto y manipulación de la que es víctima Solange (Sherlyn) por parte de su papá en contra de su mamá (Augusto y Francisca son sus padres); los deseos de un joven humilde como Ulises (Pee Wee) por salir adelante y vengar la muerte de su hermano y la aparición de Pedro (José Luis Reséndez) antiguo novio de Valentina.
Durante el transcurso de la telenovela, ciertos personajes van cobrando mayor relevancia como el caso del jardinero Leónidas (Manuel “El Flaco” Ibáñez), quien pasa de ser un simple servidor del colegio a una figura que trastoca la normalidad de todos, o el papá de Sebastián, Armando (José Elías Moreno), quien tras una falsa identidad de cura se irá enamorando de Guadalupe (Ana Bertha Espín), y también tenemos la formación de un grupo musical, integrado por Solange y algunos de sus amigos.
En el transcurso de los 135 capítulos que integran la historia, nos vamos enterando de secretos que poco a poco van saliendo a la luz, haciendo que nos demos cuenta que entre los personajes principales existe una relación que muchos de ellos ignoraban, pero que al igual que un camaleón, se han camuflajeado para estar en contacto y lograr las metas que cada quien tiene en mente.
Un concepto diferente pero fallido
A pesar de que contaba con elementos suficientes para captar la atención del público, esto no se logró debido a varios factores.
En primer lugar, el horario de las 6 de la tarde nos había regalado un fenómeno juvenil como lo fue Rebelde, y un monstruo televisivo de esas características no es fácil siquiera de igualar. Su mismo creador (Pedro Damián), trató de hacerlo sin lograr éxito con Verano de Amor (2009). Volver a retomar el concepto de jóvenes estudiantes muy diferentes unos de otros se quedó como un intento nada más.
En segundo lugar, siempre apostar por ideas nuevas lleva un gran riesgo y en esta ocasión meter una historia de policías y ladrones en un horario vespertino no despertó mucho interés en la audiencia. Hay que tomar en cuenta que veníamos de historias tradicionales como En Nombre del Amor y Mi Pecado, de modo que el cambio fue drástico.
En el tercer aspecto, sabemos que las telenovelas son una buena herramienta no sólo para lanzar actores, sino también cantantes y este proyecto no fue la excepción. Más allá que la propia Belinda se haya encargado de cantar el tema principal, se apostó por crear un concepto musical.
Uno de los puntos fuertes de Rosy Ocampo es que sabe manejar la parte musical de sus historias y sacarles el mayor jugo posible. Ya veníamos de un antecedente en sus novelas infantiles como El Diario de Daniela (1998), Amigos por Siempre (2000), Aventuras en el Tiempo (2001), Cómplices al Rescate (2002), Alegrijes y Rebujos (2003) y Misión S.O.S (2004). La productora había descubierto una fórmula que consistía no solamente en musicalizar, sino que la música fuera parte de la historia, para así poder llegar al esperado final en vivo en lugares masivos como el Estadio Azteca.
Sin embargo en este caso, la situación era diferente pues no se dirigía a un público infantil, sino a uno juvenil. El público juvenil es en muchas ocasiones el más complicado. Volviendo a lo mencionado anteriormente, era muy difícil que un nuevo grupo salido de una telenovela superara lo logrado por RBD. Sumado a ello, el intento por colocar a Pee Wee como actor no resultó algo favorable.
Lo destacable
No todo fue malo pues Camaleones nos regaló cosas interesantes. Primeramente el regreso a la televisión de Belinda y Alfonso Herrera, quienes tienen un gran número de seguidores y en sus personajes había química. Independientemente de cómo le vaya a una historia esto siempre será un punto a favor.
Esta fue la última producción donde vimos a Edith González trabajando para Televisa. Ella volvió a protagonizar un melodrama en 2011, pero para TV Azteca (Cielo Rojo). Guillermo García Cantú nos ofreció un villano que se hacía odiar. Además la actuación del “Flaco” Ibáñez, nos hizo verlo como un actor completo que igual maneja la comedia que el drama.
Así pues, con sus pros y contras, Camaleones es una historia que por más que se trató de impulsar se quedó en medio del camino.
Camaleones se encuentra disponible en Blim.